Un día en el cole

     Creo que toda mamá sueña con tener un huequito en la pared del salón de su peque por el cual espiar y ver qué sucede dentro de la clase.

     Me pasó muchas veces que se inventaban cualquier excusa para asomarse un minutito. Y es normal, están entregando su tesoro más preciado y quieren asegurarse que todo esté bien.

¡Hoy les abro la puerta de mi salón!

     Trabajé con bebés de 4 meses hasta chicos de 4 años así que narraré un poco una rutina general. Voy a ser lo más sincera posible y aunque es imposible generalizar porque cada mae actúa como cree, puedes darte una idea de lo que vive tu hijo cada día. Comenzamos:

RECIBIMIENTO: Período que dura entre 45 minutos a 1 hora. La idea es esperar a que estén todos (o casi todos) antes de comenzar el trabajo del día para que nadie se pierda nada. Solemos dejar que jueguen con lo que hay en el salón con ciertas condiciones de orden y también es un buen momento para terminar algún trabajillo que se tenga pendiente de días anteriores. Los primeros días suele ser el momento más caótico del día, así que si ves a los peques llorar (y se lo contagian al tuyo) tranquila....es normal.

SALUDO O REUNIÓN: Hacemos un círculo y cantamos canciones, nos damos los buenos días y revisamos qué actividades tenemos para eso día. Es el momento más propicio para que los niños opinen, pregunten y se expresen sobre el tema que se este tratando o sobre cualquier otra inquietud.

TRABAJO: Aquí viene el trabajo "en mesa" generalmente en su libro de actividades o en hojitas sueltas donde trabajamos atención, coordinación óculo-manual, agarre del lápiz (de lo que haremos un post pronto) y motricidad fina en general.

MERIENDA/RECREO: Poco que explicar. Durante la merienda nos centramos en fomentar hábitos y en el recreo en mantener la paz, propiciar el compartir y tener a los "spider-man" bajo control! jeje

DESPEDIDA: No lleva mucho tiempo pero para mi es importantísimo! Aquí repasamos lo que hemos hecho en el día trabajando así la evocación de recuerdos, podemos diagnosticar qué ha quedado más claro y que no tanto y asomamos un poco qué haremos al día siguiente. Nada da a los niños más seguridad que saber lo que va a pasar. 

     Esa rutina es (o debe ser) el esqueleto de cualquier jornada en el cole, luego suelen incluirse alguna actividad más libre de arte, ciencia, deporte, etc.  y momentos de lectura de cuentos.

     

     Lo que debes tener en cuenta es que esto es multiplicado por 20 niños o incluso 30 (yo he llegado a trabajar con grupos de 32) y que si bien tratamos de dar atención a todos por igual hay momentos en los que se hace cuesta arriba. Así que comprende a la mae cuando le coloque un sellito al revés a tu peque :) jeje