Dejando los pañales

Esta etapa genera sentimientos encontrados. Por un lado pensamos que nuestro chipilín está creciendo y es cada vez más independiente; pero por otro este momento está lleno de "accidentes" e incluso momentos de retroceso que pueden llegar a frustrar.

La primera pregunta que nos hacemos es ¿Cuándo está listo para dejar los pañales? Pues bien, cada niño tiene su ritmo y nada hacemos intentando forzarlo. El momento ideal para comenzar a dejar los pañales es el momento en el que el bebé alterna sus piernitas para subir y bajar escaleras. Es ese el momento evolutivo en el cual el control del esfínter está maduro.

¿Por dónde comenzar? Ante todo la palabra clave de todo esto es paciencia. No es ninguna novedad que los peques quieren ser como los mayores, y es esa una ventaja a la hora de comenzar. Aquello de que el mejor aprendizaje es el que se da con el ejemplo es igualmente válido para ir al baño. Según si es chico o chica es bueno que papá o mamá permitan que su peque los acompañe alguna que otra vez al baño. El ver a su referente adulto hacerlo será más fácil porque partiremos de la imitación.

¿Qué pasa con el discurso de "ya eres mayor"? Está bien motivar al peque diciéndole que cada vez puede hacer más cosas porque se va haciendo más mayor, pero CUIDADO! a veces nos pasamos y el bebé puede plantearse si sus acciones de "chico mayor" le traerá buenas consecuencias. Puede llegar a pensar "si dejo los pañales significa que seré mayor, y entonces jugarán menos o tendré menos beneficios?". Así que mucho cuidado con convertir el deseo de crecer con la presión de dejar de ser niño, que en ningún caso es lo mismo.

Estas son las recomendaciones básicas de un buen comienzo. El tiempo que dure lo decidirá cada niño, pero si se afronta de la forma correcta, ¡Todo estará bien!